Aluminium OS: el nuevo sistema operativo de Google basado en Android e IA

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Google se está preparando para dar un salto gordo en el mundo del PC con un nuevo sistema operativo llamado Aluminium OS, una apuesta que busca por fin plantar cara de tú a tú a Windows y macOS llevando Android al escritorio y abrazando la inteligencia artificial desde la base misma del sistema. No hablamos de una simple capa visual ni de un experimento puntual, sino de una nueva plataforma pensada para funcionar en todo tipo de ordenadores personales y dispositivos híbridos.

Este proyecto, conocido internamente como Aluminium OS o ALOS, ha salido a la luz gracias a diversas ofertas de empleo y filtraciones que detallan su enfoque: unificar ChromeOS y Android, aprovechar la enorme base de apps móviles, sacar partido a los nuevos chips preparados para IA y ofrecer una experiencia continua entre móvil, tablet y PC. Todo ello con la IA Gemini integrada en el núcleo del sistema y una ambición mucho mayor que la de los Chromebooks tradicionales.

Qué es Aluminium OS y por qué Google lo está creando

Aluminium OS es, en esencia, un nuevo sistema operativo de Google basado en Android pero adaptado específicamente al entorno de escritorio y a hardware más potente, como portátiles de gama alta, PCs de sobremesa, tablets avanzadas, 2‑en‑1 y mini‑PCs. Su nombre aparece mencionado de forma explícita en ofertas de trabajo para puestos de alto nivel, como gerentes senior de producto responsables de portátiles y tablets.

El propio nombre del proyecto tiene su gracia: «Aluminium» sigue la misma lógica que Chromium (la base de código abierto de ChromeOS), jugando con el nombre de un metal ligero que termina en “‑ium”. Además, la ortografía británica resalta el prefijo “Al”, un posible guiño a Android como pilar de esta nueva plataforma. La idea es clara: reutilizar lo mejor del ecosistema Android y darle forma de sistema de escritorio moderno.

Durante años, Google ha mantenido dos líneas paralelas: Android en móviles y ChromeOS en Chromebooks. Android domina aplastantemente en smartphones y tablets, pero en ordenadores personales ChromeOS nunca ha logrado acercarse al dominio de Windows ni al ecosistema de macOS. Con Aluminium OS, la compañía quiere dejar de dividir esfuerzos y apostar por una única base tecnológica que pueda escalar desde el móvil hasta el PC.

En la práctica, esto se traduce en un sistema que nace de Android, hereda su kernel Linux, sus frameworks y su compatibilidad de aplicaciones, pero se rediseña de arriba abajo para pantallas grandes, trabajo de productividad y uso intensivo de IA. El objetivo es que no parezca simplemente “Android en grande”, sino un entorno de escritorio completo que aproveche la familiaridad y el catálogo de Android.

Todo este movimiento responde a una estrategia de fondo: ganar relevancia en el mercado del PC, un espacio donde hasta ahora Google estaba en segundo plano. Con los nuevos procesadores ARM para ordenadores, las NPU dedicadas a IA y una base de usuarios móviles enorme, el momento es especialmente propicio para intentarlo de nuevo, pero esta vez con mucha más fuerza.

Fusión de Android y ChromeOS: un solo sistema para móvil y PC

La idea de fusionar Android y ChromeOS lleva años rondando dentro de Google. Allá por 2015 ya se habló de un proyecto llamado Andromeda que buscaba algo parecido, pero nunca llegó a materializarse. Desde entonces, la compañía ha ido soltando pequeñas piezas: compatibilidad de apps Android en Chromebooks, modos escritorio cada vez más pulidos en Android 15 y 16 y anuncios oficiales sobre la integración del kernel de Android dentro del núcleo de ChromeOS.

En 2024, responsables del ecosistema Android confirmaron que ChromeOS adoptaría componentes clave de Android para acelerar la integración de la IA y simplificar el trabajo a los desarrolladores. Esa base común permitía unificar librerías, mejorar la compatibilidad entre dispositivos y reducir el esfuerzo de mantener dos plataformas distintas. Aluminium OS es el paso lógico siguiente: un sistema construido “AI‑First” que aglutine todo esto bajo un mismo paraguas.

Según las filtraciones, Aluminium OS está concebido como un sistema operativo unificado que combinará lo mejor de ChromeOS y Android: la seguridad, ligereza y orientación a la nube de ChromeOS, con la flexibilidad y el catálogo de aplicaciones de Android. La meta es obtener algo similar a lo que ha hecho Apple con iOS y iPadOS integrándose con macOS, pero bajo la visión de Google.

La propia hoja de ruta de dispositivos menciona varias categorías con la marca “AL Entry”, “AL Mass Premium” y “AL Premium”. Esta clasificación indica que el sistema no se quedará en equipos baratos para educación, sino que abarcará desde modelos accesibles hasta hardware de gama alta dispuesto a competir con máquinas como los MacBook Pro o las Surface de Microsoft.

Aunque durante un tiempo ChromeOS y Aluminium OS coexistirán en el mercado, la intención de fondo es que Aluminium se convierta en el heredero natural de las Chromebooks y en la plataforma principal para PCs con sello Google. Las propias ofertas de trabajo hablan abiertamente de planificar la transición desde ChromeOS hacia Aluminium garantizando continuidad de negocio a largo plazo.

Arquitectura, ecosistema y tipos de dispositivos compatibles

Aluminium OS parte de un enfoque muy distinto al de Windows o macOS, ya que no nace desde el mundo del PC tradicional, sino desde el ecosistema móvil. Esto significa que su arquitectura se apoya en Android: kernel Linux optimizado, frameworks consolidados y una comunidad gigantesca de desarrolladores y aplicaciones ya existentes.

Desde el primer momento, el sistema está pensado para funcionar en múltiples factores de forma: portátiles clásicos, convertibles 2‑en‑1, tablets, equipos desmontables, mini‑PCs tipo “caja” y, previsiblemente, otros formatos que puedan surgir con el tiempo. Esta flexibilidad recuerda al propio Android, pero aplicado de manera específica a dispositivos orientados a productividad y trabajo en escritorio.

Las pruebas internas se están realizando sobre chips MediaTek Kompanio 520 y procesadores Intel Alder Lake de 12.ª generación, lo que da pistas de la ambición de Google a la hora de cubrir tanto arquitecturas ARM como x86. En entornos con NPU potentes, la gestión térmica —y la pasta térmica para PC— cobra especial importancia.

A diferencia de ChromeOS, históricamente asociado a Chromebooks de bajo coste y uso educativo, Aluminium OS aspira a desplegarse en una gama mucho más variada de máquinas: desde equipos de entrada hasta portátiles premium de diseño cuidado y gran potencia gráfica. Eso incluye también sobremesas compactos y mini‑PCs orientados a oficinas y entornos profesionales.

Este planteamiento transversal permite a Google posicionar Aluminium OS como una alternativa real a Windows y macOS en casi todos los segmentos de precio, evitando encasillarse en nichos muy específicos. A su vez, la base Android facilita que muchos desarrolladores adapten rápidamente sus aplicaciones móviles al escritorio con cambios mínimos.

Un sistema AI‑First: Gemini en el corazón de Aluminium OS

Uno de los rasgos más distintivos de Aluminium OS es que la inteligencia artificial no es un añadido, sino el núcleo del sistema. Google habla de un sistema construido “con IA en su núcleo”, lo que significa que los modelos Gemini se integrarán profundamente en la experiencia de usuario, en la gestión del sistema y en muchas de las herramientas de productividad.

Ya hemos visto cómo Gemini es capaz de funcionar de forma local en móviles Android de gama alta, aprovechando el rendimiento de CPU, GPU y NPU para ejecutar tareas complejas sin depender siempre de la nube. Llevar esta idea a ordenadores, donde el consumo energético es menos restrictivo y el hardware suele ser más potente, abre la puerta a funciones de IA mucho más ambiciosas.

En Aluminium OS, la IA tendría un papel central: asistentes contextuales permanentes que entienden lo que estás haciendo, herramientas de automatización capaces de encadenar varias acciones, sugerencias inteligentes mientras escribes un correo o preparas una presentación, traducción en tiempo real, reconocimiento de voz más preciso y búsqueda avanzada entre documentos y contenido local y en la nube.

La visión de Google es que el usuario deje de pensar en abrir una app concreta para cada cosa y pase a pedirle directamente a la IA que resuelva tareas: “prepara un resumen de este documento y compártelo con el equipo”, “ordena mis descargas por relevancia y elimina lo prescindible”, “búscame todos los archivos donde hable de este proyecto y crea una línea temporal”. Todo ello apoyado por el contexto que el sistema acumula en segundo plano.

Funciones ya conocidas del ecosistema Android, como Circle to Search u otros atajos impulsados por IA, se llevarían a un entorno de escritorio donde tienen todavía más sentido: selección inteligente de contenido en pantalla, búsquedas visuales avanzadas, generación de material de apoyo para presentaciones o informes y un largo etcétera que Google irá desvelando a medida que el proyecto se acerque al lanzamiento.

Experiencia de usuario: del móvil al escritorio sin fricciones

Uno de los grandes objetivos de Aluminium OS es ofrecer una experiencia realmente continua entre móvil y PC, derribando la barrera que hoy separa aprender a usar un sistema en el teléfono y otro distinto en el ordenador. Al basarse en Android, la interfaz y muchos elementos de interacción resultarán familiares a quienes ya usan un móvil Android.

Esto no quiere decir que la interfaz sea un simple “Android gigante”; más bien hablamos de un entorno adaptado a pantallas grandes y tareas de productividad, con ventanas, escritorios, gestión avanzada de múltiples aplicaciones abiertas y soporte completo para ratón, teclado y periféricos. La clave está en equilibrar lo mejor de ambos mundos: la simplicidad móvil con la potencia del PC.

Gracias a la base común, los desarrolladores podrán crear aplicaciones que se adapten automáticamente al contexto: interfaz táctil y compacta en el móvil, diseño optimizado para ratón y teclado en el PC, y transición fluida al pasar de un dispositivo a otro. Para el usuario, esto se traduce en que puede iniciar una tarea en el teléfono, continuar en la tablet y rematarla en el portátil sin preocuparse demasiado por formatos o compatibilidades.

Google también quiere potenciar la sincronización silenciosa y permanente de datos entre dispositivos, apoyándose tanto en la nube como en conexiones locales cuando sea posible. De este modo, documentos, configuraciones, sesiones de apps y hasta el estado de algunos procesos podrían viajar de un dispositivo a otro con muy poca fricción.

En paralelo, la integración profunda de la IA permitiría funciones como recordatorios basados en contexto (por ejemplo, retomar en el portátil el archivo que estabas editando en el móvil), resúmenes automáticos de lo que has hecho durante el día en diferentes dispositivos o recomendaciones sobre qué tarea deberías atender en cada momento según tus hábitos.

Diferencias frente a Windows, macOS y otros sistemas

Si comparamos Aluminium OS con los grandes del sector, la primera gran diferencia es obvia: Windows y macOS se crearon originalmente para ordenadores de escritorio y solo después han ido integrando funciones móviles y de IA, mientras que Aluminium parte justo del camino contrario, desde el universo Android y la informática móvil hacia el PC.

En cuanto a inteligencia artificial, tanto Microsoft como Apple están empujando fuerte con Windows con Copilot y las nuevas funciones de macOS basadas en IA (incluido el impulso del Apple M5 y su impulso a la IA), pero en el caso de Google la idea es que la IA no sea solo una “capa” o un asistente, sino el núcleo organizador del sistema. Desde la gestión de archivos hasta la configuración del dispositivo, todo estaría atravesado por la lógica de Gemini y sus sucesores.

Otra diferencia clave tiene que ver con la gama de dispositivos objetivo. Windows y macOS suelen asociarse a categorías bastante definidas (sobre todo en el caso de Apple, muy ligada a su propio hardware), mientras que Aluminium OS se plantea como una opción transversal que puede vivir en portátiles ligeros, sobremesas potentes, tablets, convertibles y mini‑PCs, cubriendo un abanico muy amplio de necesidades y precios.

Además, el sistema de Google llega en un momento en que el hardware del mercado se ha volcado en el concepto de ordenadores “nativos de IA”, con CPU, GPU y, sobre todo, NPU pensadas para acelerar modelos de inteligencia artificial local. Paradójicamente, buena parte de este impulso viene del empuje de Microsoft y sus socios con los nuevos Windows AI PC, pero Google puede aprovecharlo directamente con Aluminium OS.

Por último, la base Android ofrece una ventaja importante en cuanto a catálogo de apps y servicios. Millones de aplicaciones ya están construidas sobre sus frameworks, y muchas de ellas podrían adaptarse con relativa facilidad al nuevo entorno de escritorio. Esto reduce significativamente el problema del “arranque en frío” que han sufrido otros sistemas alternativos al intentar atraer desarrolladores.

Transición desde ChromeOS y compatibilidad con equipos actuales

La llegada de Aluminium OS plantea inevitablemente la pregunta de qué ocurrirá con los Chromebooks y ChromeOS. Los documentos internos y las ofertas de empleo apuntan a una estrategia de transición progresiva, donde ambos sistemas convivan durante un tiempo para no dejar tirados a usuarios, centros educativos y empresas que dependen actualmente de ChromeOS.

Google tiene intención de seguir ofreciendo dispositivos con ChromeOS y ChromeOS Plus, especialmente en el ámbito educativo y en sectores donde la simplicidad extrema y los costes ajustados siguen siendo prioritarios. Al mismo tiempo, irá incorporando el nuevo Aluminium OS en nuevas gamas de productos bajo las etiquetas AL Entry, AL Mass Premium y AL Premium.

En cuanto a posibles actualizaciones, no está descartado que ciertos modelos recientes de Chromebooks puedan dar el salto a Aluminium OS si su hardware es compatible, especialmente aquellos basados en procesadores Intel de 12.ª generación o chips como el MediaTek Kompanio 520, que ya se utilizan en las pruebas internas. Sin embargo, migrar un parque tan diverso de dispositivos sin romper la experiencia será todo un desafío.

La compañía es consciente de que un cambio brusco podría generar rechazo, por lo que apunta a un plan de migración con soporte a largo plazo, donde los usuarios y las organizaciones puedan decidir cuándo dar el salto al nuevo sistema. Durante ese periodo, ChromeOS seguiría recibiendo actualizaciones de seguridad y mejoras, aunque la innovación más puntera se concentraría cada vez más en Aluminium OS.

En paralelo, Google tendrá que cuidar muy bien la comunicación con fabricantes, operadores y partners del sector educativo y empresarial para garantizar que la transición no interrumpa flujos de trabajo críticos. El éxito de Aluminium OS dependerá tanto de sus capacidades técnicas como de lo suave que resulte este cambio de etapa.

Lanzamiento, hoja de ruta y futuro del PC con Android

Las filtraciones más consistentes apuntan a que Aluminium OS tendría su presentación oficial alrededor de 2026, posiblemente en un evento para desarrolladores del tipo Google I/O, y que se basaría en una versión avanzada de Android (en torno a Android 17). Antes de ese momento, es de esperar que Google libere progresivamente SDKs, herramientas y betas para que los desarrolladores adapten sus aplicaciones.

En el terreno del hardware, Qualcomm y Google ya han dejado caer que trabajan juntos en una base técnica común para PCs y equipos de escritorio, lo que refuerza la idea de que habrá una nueva generación de ordenadores con Android optimizados para IA. Los nombres en clave de ciertos chips Snapdragon apuntan precisamente a compatibilidades con versiones futuras de Android pensadas para PC.

La ventana temporal también resulta interesante por otro motivo: la industria ya se ha alineado alrededor de una nueva generación de “PCs con IA de serie”, donde es casi obligatorio que el sistema operativo saque partido a las NPU integradas. Microsoft ha abierto camino con sus últimos Windows centrados en Copilot, y Google podría llegar con Aluminium OS en un momento en el que los usuarios ya esperan ese tipo de funciones como algo normal.

A largo plazo, la apuesta pasa por que el escritorio se convierta en uno de los grandes campos de batalla de la IA, con Windows y Aluminium OS compitiendo directamente en máquinas tan variadas como portátiles finos, sobremesas de trabajo creativo, equipos de oficina, mini‑PCs conectados a la tele del salón o estaciones de juego híbridas.

Si la jugada sale bien, Google podría pasar de ser “el rey de los móviles” a jugar un papel mucho más relevante en la informática personal en general, ofreciendo un único ecosistema que se extiende desde el reloj inteligente hasta el ordenador de sobremesa. El camino no será corto ni fácil, pero la magnitud del proyecto Aluminium OS demuestra que la compañía va muy en serio.

Todo apunta a que Aluminium OS será la apuesta más ambiciosa de Google para redefinir cómo usamos el PC, mezclando la madurez de Android, la ligereza de ChromeOS y una capa profunda de inteligencia artificial Gemini que atraviesa todo el sistema; si consigue ofrecer una transición suave desde ChromeOS, aprovechar el empuje del nuevo hardware con NPU y convencer a desarrolladores y fabricantes, podríamos estar ante el inicio de una nueva etapa donde los llamados “PC con Android” dejen de ser una rareza y se conviertan en un competidor real en el escritorio tradicional.